Papá como pocos, hombre singular, lleno del Espíritu Santo, también conocido como el Santo del Silencio. Un Hombre escogido por Dios para ser el padre de JESÚS y esposo de MARÍA.
San José supo ser obediente al plan de Dios, acompaño y fue la cabeza de una familia humilde, donde sus pilares fueron la Protección y Lealtad.
Como jefe de familia, trabajador, te pedimos en este tiempo donde todo es descartable,donde esta de modo la felicidad pasajera. San Jose enseñanos cuales son los pilares a los que hoy debemos aspirar y sostener nuestra familia.
En esta cuaresma seamos obedientes, leales, compañeros mediante el silencio y la oración pidamos a San Jose que interceda ante Dios para que podamos alcanzar estas gracias.
Revolucionemos lo cotidiano, hagamos de lo común algo extraordinario para que nuestra vida no este llena de momentos vacíos y sin sabores sino que seamos sal y luz para los que nos rodean.
Esta Cuaresma debe ser el momento en el que Dios con su inmensa luz y sabiduría nos enseñe a llevar una vida austera y simple al igual que a San José.
Porque Dios es simple y se deja encontrar por el corazón que lo busca de manera sincera y transparente sin esconderle nada, sin máscaras.
Pongamos de moda las virtudes que San Jose les transmitió a Jesús.
¿No te parece que ya es tiempo de una cambio radical en tu vida?.
