miércoles, 18 de diciembre de 2019

¡DESPIERTA!


Despertar sinónimo de movimiento, avivamiento, estimular, provocar. En el evangelio de hoy vemos un suceso que da comienzo al origen de Jesús en la historia de la humanidad.
Vemos como el espíritu Santo obró de manera misteriosa en la vida de María, seguramente en sus pensamientos, antes de que el Ángel se le apareciera en su vida; ella tenía el deseo de irse a vivir junto con José, y luego tener un hijo (teniendo en cuenta que el texto del evangelio nos dice que José en era su esposo). Pero los planes de Dios en su vida eran otros, El hizo todo lo contrario, vio el deseo en su corazón y la bendijo con un hijo pero esa bendición llego de un modo que ella no lo esperaba, o no lo había planificado tal vez. Sin embargo, en los planes de Dios ya estaba pensado así.
 Y que paso con José, nos dice el evangelio de hoy “un hombre justo y no quería denunciarla públicamente, resolvió abandonarla en secreto”. Tomo el camino más fácil, por así decirlo, abandono a María, dejo el plan de salvación que Dios tenía para toda la humanidad, el plan que Dios había pensado para José, para la sagrada familia.
Pero como a Dios no se le escapa nada, José finalmente despertó, en sueños el Ángel le dijo lo que debía hacer.
Cuantas veces nosotros en lo cotidiano sentimos la presencia de Dios en nuestro diario caminar, en el servicio, en acciones concretas  y dejamos pasar la gracia, abandonamos, tomamos el camino del cobarde, la salida más fácil. Tapamos nuestros oídos y nos dejamos llevar por la corriente del mundo que solo quiere apartarnos de la gracia. Escuchamos esa voz en nuestra cabeza que nos dice, no podes, es difícil, no sos digno.
El Señor hoy nos invita a Despertar, a movernos,  a provocar en tu vida un cambio, un salir al encuentro del otro, a mirar ese plan que tal vez abandonaste por miedo a…. a retomar un servicio, a decirle Si a Dios para caminar mar adentro, a profundizar en tu vida de fe, a ser testimonios vivos del amor de Dios en tu familia, en lo cotidiano. A abandonar aquello que te aleja de Él, a volver tu mirada a Dios, a vivir una vida en plenitud de su mano, a sentirte amado/a por Dios, a sentirte ¡VIVO!
Y a vos ¿a qué te invita a despertar el Señor?

¡Despierta Joven que aún hay tiempo!

Que este tiempo de preparación para el nacimiento de Jesús sea ese momento de Despertar en tu vida, de ponerte en acción, de volver al Amado.

¡Gracias por leer!
¡Que Dios te Bendiga y María Santísima te proteja siempre!

Evangelio: Mateo 1, 18-24

             Este fue el origen de Jesucristo:
            María, su madre, estaba comprometida con José y, cuando todavía no habían vivido juntos, concibió un hijo por obra del Espíritu Santo. José, su esposo, que era un hombre justo y no quería denunciarla públicamente, resolvió abandonarla en secreto.
            Mientras pensaba en esto, el Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no temas recibir a María, tu esposa, porque lo que ha sido engendrado en ella proviene del Espíritu Santo. Ella dará a luz un hijo, a quien pondrás el nombre de Jesús, porque él salvará a su Pueblo de todos sus pecados.»
            Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que el Señor había anunciado por el Profeta: La Virgen concebirá y dará a luz un hijo a quien pondrán el nombre de Emanuel, que traducido significa: «Dios con nosotros.»
           Al despertar, José hizo lo que el Ángel del Señor le había ordenado: llevó a María a su casa.
Palabra del Señor.

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